martes, 8 de mayo de 2012

Se soluciona gracias a él

Te ves frágil, pesimista, sólo se te ocurre llorar… da igual, todo pasa. Entonces aparece él con esa estúpida sonrisa, no sabes por qué pero en este instante lo odias. Te hace tan feliz que logras por un momento olvidarte de todos tus problemas, se acerca y te coge la mano «qué imbécil, cree que así se soluciona todo» piensas, y la verdad es que sí. Se dispone a besarte, te quitas, encima de todo le empujas, parece que todo te da igual aunque no sea así en el fondo... Lo único que no quiere es verte así, aunque no se te ocurre estar de otra manera. Todo te va mal, a tu alrededor todo son problemas... Vale, puede que él no tenga nada que ver, puede que él no tenga la culpa... pero sabes que es el único capaz de aguantar tus llantos, tus gritos, tus estupideces... en general: tus bajones.
Se acerca otra vez... esta vez te abraza fuerte, sabe que le empujarás y que no querrás abrazarlo; pero él sabe perfectamente que es lo que tú necesitas. Como siempre cedes, le devuelves el abrazo... Empieza otra tarde bonita a su lado y por media hora, una hora, tal vez dos o tres consigues olvidarte de todo el mal que te rodea. Gracias a él, el mundo duele un poco menos.

martes, 1 de mayo de 2012

El miedo nos hace cobardes

En el fondo hay cosas que nunca llegarás a decir por miedo. En realidad todos somos un poco cobardes cuando se trata de decir algo que nos importa demasiado. Que las cosas que importan de verdad, son las que se dicen con una mirada, un gesto, una sonrisa... Hasta hay veces que sin tener lo que quieres, te da miedo perderlo. Pero no vale la pena forzar las cosas, todo ocurre cuando menos te lo esperas, como por arte de magia, para bien o para mal, te das cuenta de que nada depende de ti, que también depende de otros, eso hace que la vida sea tan curiosa. Que las cosas no tienen valor por sí solas, serán importantes en la medida que tú les des importancia.